La Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) inició en los últimos meses 974 juicios de apremio para recuperar deudas de contribuyentes que deben el Impuesto a las Embarcaciones Deportivas en una búsqueda de «sectores con alto poder económico, de evidente capacidad contributiva».
Según informaron desde la Agencia en un comunicado, el monto que se recaude se volcará en «la construcción de rutas, de más escuelas y jardines de infantes, de infraestructura sanitaria y mejores servicios que permitan seguir ampliando derechos y transformando la Provincia».
Además de estas acciones para recuperar deuda por vía judicial, en las últimas semanas la Agencia de Recaudación intensificó los operativos conjuntos con la Administración Federal de Ingresos Públicos para fiscalizar parques náuticos, guarderías y embarcaderos, de manera de detectar embarcaciones deportivas sin declarar o intimar a quienes deben impuestos.
«Es importante seguir trabajando en el cumplimiento tributario, de manera que quienes poseen embarcaciones sepan que hay un impuesto que pagar y una Agencia de Recaudación dispuesta a proceder con los mecanismos de cobro judicial si no muestran voluntad de pago», resaltó Cristian Girard, director de ARBA.
ARBA APUNTÓ CONTRA LAS EMBARCACIONES DE LUJO
En todos los casos, el cobro por vía judicial incluye a dueños de embarcaciones importantes, con una eslora mayor a 7 metros, que adeudan varias cuotas del tributo provincial. Según precisó en el comunicado, la Agencia planea recaudar unos $217 millones.
Como parte de esa labor, los equipos de fiscalización de ARBA realizaron un operativo en un club náutico de San Isidro, donde detectaron 3 embarcaciones no inscriptas y otras 11 que registraban una deuda global de más de $18 millones.
Eso se suma a los 65 yates, veleros y lanchas no declaradas, que fueron descubiertas hace dos semanas en San Fernando, así como a las casi 600 embarcaciones que acumulaban una deuda total de $40 millones, también en un amarradero de ese distrito.
«El gobierno de Axel Kicillof se financia con recursos genuinos, y desde ARBA buscamos recuperar esos recursos entre quienes más tienen. Queremos mejorar la cultura de cumplimiento tributario, y damos posibilidades para que las y los contribuyentes puedan ponerse al día. Pero en caso de que no cumplan, procedemos con este tipo de acciones de fiscalización», puntualizó Girard.