La distorsión de precios afecta a todos los rubros. Pero sin lugar a dudas las golosinas encabezan la lista de los productos con precios más dispares. El mismo chocolate puede costar hasta un 50% menos según el kiosco en que se compre. Lo curioso es que la diferencia de valores no radica por barrios, sino que en una misma manzana se pueden conseguir cifras totalmente diferentes.
Es que, solo para citar algunos ejemplos, las diferencias son más que consideradas. El clásico huevo Kinder, la perdición de los más chicos tiene un abanico de precios muy amplio. En un supermercado se consigue por $110, en el clásico kiosco de barrio ese valor asciende a $130, ahora bien en las cadenas 24 horas llega a valer $170.
Los ejemplos se multiplican. La clásica Bananita Dolca de 16 gramos cuesta $40 en un kiosco en el corazón de Caballito, mientras que a sólo dos cuadras en la cadena K24 su precio es de $60 y en Open 25, a pocos metros de allí cuesta $48, es decir que el pequeño chocolate tiene una variación de su precio del 50%.
Los kioscos fueron uno de los rubros más golpeados en 2020 por la pandemia. La menor circulación y el home office hicieron que las típicas compras al paso cayeran drásticamente durante los meses de restricciones más severas, lo que hizo que cayeran un 30% las ventas.
Esos números, con el regreso de las clases, fueron recuperándose durante este año. En el primer semestre del año se registra un crecimiento del 18% en promedio en cuestión de volumen de venta, sin tener en cuenta la inflación.
La explicación del porque se da esta dispersión de precios parece estar atada a los costos que deben afrontar los comerciantes para su funcionamiento. Hay que tener en cuenta que en caso de los kioscos más grandes, muchos cuentan con empleados, por ende deben pagar cargas sociales a diferencia de aquellos más chicos que son atendidos generalmente por sus dueños.
La diferencia de precios, también, se da por la ubicación de los kioscos. No es lo mismo un local en una avenida céntrica que en una calle de barrio, aunque estén ubicados en el mismo barrio, en esos casos se dan las mayores distorsiones de precios por los alquileres y los gastos fijos que deben abonar son muy distintos.