El panorama de desintegración del Grupo Garbarino parece inevitable. Al rechazo del Gobierno de auxilio financiero, cierre de locales, endeudamiento insostenible, despido masivo de personal de su filial Compumundo ahora se suma una propuesta de retiros voluntarios para todos los trabajadores de la que llegó a ser la mayor cadena de electrodomésticos de la Argentina.
Además de no cobrar el sueldo desde hace ya cuatro meses, los 4.000 empleados de Garbarino ahora empezaron a recibir una invitación a dejar las tareas de manera negociada con la empresa propiedad de Carlos Rosales.
Bajo el título «Asunto, plan de retiro voluntario Garbarino», la propuesta contiene una particular clausula que promete iniciar el pago de la indemnización acordada recién a partir de enero del año próximo y en 24 cuotas consecutivas.
Es decir, los trabajadores que por alguna razón acepten la ridícula oferta empresaria deberían pasar dos meses sin percibir ningún ingreso y además resignarse a terminar de cobrar el monto total correspondiente en enero del 2024.
«Garbarino S.A ofrece un plan de retiro voluntario para sus empleados. Encontra a continuación las condiciones del mismo para que puedas tomar una decisión con la información necesaria» agrega la carta enviada al personal.
Esas condiciones son:
1) Fecha de postulación desde el viernes 22 de octubre al martes 26 de octubre.
2) Alcance a todos los empleados activos que se encuentren en la nómina de Garbarino S.A.
3) Liquidación final (sueldo proporcional del mes en curso, aguinaldo, vacaciones no gozadas)
4) Pago de indemnización legal Art. 245 LCT y Preaviso. Esta suma es sin la aplicación del DNU 34/2019 con sucesivas prórrogas y modificatorias. Al monto mencionado se le deduciran los montos vencidos impagos de créditos a los empleados si los hubiera.
5) Plazo de pago 24 cuotas consecutivas iguales a partir de enero 2022
Cómo se sostiene en la nota, la empresa tampoco respetaría el pago de la doble indemnización impuesta por el gobierno nacional desde el 13 de diciembre del 2019 y que en principio rige hasta fin de año ya que su finalización está atada al contexto pandemico y económico de la Argentina.
Actualmente, de la cadena queda poco y nada ya que son pocos los locales que se mantienen abiertos de los 200 que supo tener.