La inflación de octubre se ubicó en el 3,5 por ciento, con lo cual llegó al 41,8 por ciento en diez meses y hasta el 52,1 por ciento si la comparación se realiza frente al mismo mes de 2020, informó el Indec. El alza del mes pasado se explica en primer lugar por el desempeño de alimentos y bebidas, cuyos precios avanzaron en línea con el promedio de la economía. Por arriba de esa marca se ubicó prendas de vestir y calzado, que cuenta con alta protección comercial, el rubro de salud a partir de las cuotas del prepagas y dos sectores que están recomponiendo rentabilidad luego de ser muy castigados por la pandemia, como restaurantes y hoteles y recreación y cultura.
La inflación se volvió a recalentar luego de que entre los meses de mayo y agosto se observara una pequeña desaceleración en relación a valores muy altos de finales de 2020 y principios de este año. En diciembre y enero pasados, por ejemplo, la suba de los precios fue en ambos casos del 4%, mientras que en marzo y abril anotó 4,8% y 4,1%, respectivamente. La relativa caída llegó hasta el 2,5% de agosto, pero luego subió al 3,5 por ciento en septiembre y el mismo número en octubre.
El mes pasado gobierno lanzó dos medidas para poder contener los precios en rubros sensibles para el bolsillo, como son los alimentos básicos, cuyos precios se retrotraen al 1º de octubre y se mantienen congelados hasta el 7 de enero, y los medicamentos, que vuelven al 1º de noviembre y también quedan fijos hasta el 7 de enero.
El detalle por rubro
Prendas de vestir, el sector que más aumentó en los últimos doce meses (62,2%), volvió a mostrar en octubre un incremento por encima del promedio, del 5,1%, luego de que en septiembre el incremento haya sido de 6%.
Al igual que el mes anterior, el segundo lugar le correspondió al rubro de salud (4,7%), a partir de las subas autorizadas de prepagas y el incremento de los medicamentos. En una línea similar, y también parecido al desempeño de septiembre, restaurantes y hoteles sumó 4,1%, mientras que recreación y cultura tuvo un incremento 4%.
Alimentos y bebidas, con la suba del 3,4%, quedó por debajo del promedio, aunque más que duplicó la variación de agosto, que había sido de 1,5%. La aceleración se explicó en primer lugar por el aumento en frutas y verduras, lácteos, fiambres y harina y pan. En cambio, las carnes quedaron estables.
A nivel de productos, los mayores aumentos se verificaron en estacionales como el zapallo anco (34,2%), tomate (21,7%), banana (16,8%), lechuga (14,7%), limón (3,7%) y papa (3,3%). Por otro lado, el yogur firme avanzó 7,3%; la leche entera, 3,4%; el café molido, 7,2%; el aceite de girasol, 6,1% y la harina de trigo común 000 lo hizo en un 4,3%.
En tanto, el rubro de equipamiento para el hogar incrementó sus precios levemente por debajo del promedio, con un 2,8%, mientras que transporte lo hizo en un 3,1%. Además, hubo incrementos moderados en vivienda, agua, electricidad y gas, educación y comunicación.