Pese a la inflación alta, el consumo creció en julio 0,6% por ciento interanual, según informó la consultora Scentia. Es el segundo mes consecutivo en el que se registra una variación positiva, aunque en lo que va del año la baja es del 0,5%. Las cifras son previas a la aceleración de precios que se registró a comienzos de agosto de la mano de la disparada del blue y que se aceleró esta semana con la suba del tipo de cambio oficial. Por lo tanto, es probable que esta foto ya haya quedado desactualizada.
El trabajo destaca que el consumo estuvo apuntalado por las provincias donde se registró un crecimiento de 5%, frente a una caída de 5,8% registrada en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). A su vez, también se observa un fuerte contraste entre las grandes cadenas, donde el consumo creció 3,5%, y los comercios barriales, como almacenes y supermercados chinos, donde se produjo una caída de 2,3%.
En el caso de las grandes cadenas, el consumo creció tanto en el AMBA (+2,8%) como en las provincias (4,2%), mientras el retroceso del consumo en los comercios barriales se explica exclusivamente por lo ocurrido en el AMBA donde las ventas se derrumbaron un 17,1% contra una mejora de 5,7% observada en las provincias. La diferencia entre lo que ocurre en las grandes cadenas y en los almacenes se debe a que en los hipermercados se respetaron bastante los acuerdos de precios que impulsó el gobierno. Los comercios barriales, en cambio, terminaron siendo tierra de nadie, sobre todo en el AMBA.
Cuando se discrimina el consumo total por rubro, se observan caídas en los rubros alimentación (-0,3%), desayuno y merienda (-3%) y limpieza de ropa y hogar (-4,6%). La contracara son las subas en productos impulsivos (+1,3%), esos que se compran en las puntas de caja (golosinas, bebidas, pilas, etc.), bebidas sin alcohol (+5,2%), bebidas con alcohol (+1,7%), higiene y cosmética (+0,7%) y productos perecederos congelados (+2,6%). En lo que va del año, en cambio, bebidas con alcohol (+4,4%), bebidas sin alcohol (+6,6%) e impulsivos (+3,2%). El resto retrocede con fuertes caídas en limpieza de ropa y hogar (-6,7%), e higiene y cosmética (-1,1%).
El análisis por rubro discriminado por cadena muestra que en los comercios barriales solo subieron las ventas de bebidas sin alcohol (+0,4%) y productos impulsivos (9,8%). En rojo quedaron alimentación (-1,3%), desayuno y merienda (-5,7%), perecederos y congelados (-0,7%), limpieza de ropa y hogar (-6,0%), higiene y cosmética (-5,0%) y bebidas con alcohol (-4,9%).