El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que la inflación fue del mes de abril fue del 6%. De esta manera acumuló un 58% interanual, el guarismo más alto de los últimos 30 años.
Una de las cuestiones más preocupantes del dato del INDEC fue que la inflación núcleo, que no tiene en cuenta ni los segmentos regulados por el Gobierno ni factores estacionales, se aceleró por tercer mes consecutivo para anotar un 6,7%.
Por el contrario, las categorías de precios Regulados y precios Estacionales, exhibieron desaceleraciones y marcaron un 3,9% y 5,4%, respectivamente.
Entre las divisiones de mayor peso en el IPC general resaltaron los mayores aumentos promedio en Restaurantes y hoteles (pasó de 5,4% a 7,3%) y Salud (se elevó de 5% a 6,4%), este último impulsado por subas autorizadas en prepagas.
Por su parte, Prendas de vestir y calzado volvió a liderar los incrementos, con un salto mensual de 9,9% (vs 10,9% de marzo). Especialistas en el rubro explican que son varias las razones de las subas en este sector, entre las cuales están: problemas de oferta por falta de talleres para confección, recomposición de ganancias tras la crisis atravesada durante el macrismo y la pandemia, el cambio de temporada y restricciones a las importaciones, todo sumado a la inercia que atraviesa a todos los precios de la economía.
Alimentos y bebidas fue, nuevamente, la división que más incidió en el avance del IPC. De acuerdo con los datos oficiales, en este rubro se verificó un significativo aumento de 5,9%, aunque menor al de febrero y marzo.
Dentro de los alimentos que más subieron en el Gran Buenos Aires se encontraron la harina de trigo (16,1%) y el aceite de girasol (13,5%), afectados por el salto en el valor mundial de los granos.