El precio de la carne vacuna a nivel minorista continuó su proceso de desaceleración durante mayo al verificar un incremento del 1,9% mensual frente al 3,5% registrado en abril pasado.
Con lo que volvió a ubicarse por debajo de la inflación de 7,8% registrada en el mes, según un informe del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna (Ipcva).
De esta forma, la variación interanual se ubicó en 70,3% frente al 114,2% que arrojó el Índice de Precios al Consumidor (IPC) para similar período.
Por cortes, las principales alzas en precios promedio durante mayo se dieron en el osobuco, con una suba de 6,6% respecto a abril; seguido por la carnaza común (5,1%) y la paleta (4,7%). Las menores subas, por su parte, correspondieron a la picada común (0,5%), cuadrada (0,.3%) y bola de lomo (0,1%)
La carne de pollo, por su parte, registró una baja del 1,6% respecto al precio promedio de abril y una desaceleración muy importante respecto al 26,9% de abril pasado.
Más allá de esta reducción en su precio, la carne de pollo es la que mayor incremento interanual alcanzó al totalizar un avance del 132,8%.
Por su parte, el valor del pechito de cerdo se encareció un 5,9% en mayo respecto a abril y 90,2% en la comparación interanual.
Con respecto a las diferentes categorías, la carne de novillito mostró un incremento en sus precios del 1,8%, la de novillo 3,3%, la de vaquillona y ternera 1,7%.
Frente al pechito de cerdo, el asado mostró un precio relativo inferior del -6% al registrado un año atrás, y el poder de compra de la carne vacuna se modificó de 1,51 a 1,42 kilogramos de carne de cerdo en el mismo período de tiempo.