El Banco Central vendió 259 millones de dólares en el mercado de cambios y sigue sin poder contener la salida de reservas internacionales. Fuentes del mercado estimaron que parte de las ventas se vincularon con un pago de una Obligación Negociable de YPF de 286 millones de dólares.
La caída de las reservas internacionales es uno de los principales puntos de presión este año, debido a que se incrementan las presiones en el mercado de cambios y la especulación para los próximos meses. En el Ministerio de Economía aseguran que van a realizar todas las medidas necesarias para que no sea necesaria una corrección brusca del tipo de cambio oficial, y ya avanzaron en esa línea activando tramos del swap con China y consiguiendo fondos frescos de organismos internacionales de crédito. El principal problema es la caída en la oferta de divisas del campo por la sequía más importante de las últimas décadas.
El directorio del Fondo Monetario consideró el sábado pasado que las tasas de interés deben mantenerse elevadas y el tipo de cambio real en niveles altos. “Las tasas de interés reales deberían permanecer lo suficientemente positivas para hacer frente a la alta inflación y respaldar la demanda de activos en pesos”, dijo el organismo en un comunicado del fin de semana.
“Es posible que se justifiquen aumentos adicionales de las tasas en caso de que se produzcan nuevos shocks inflacionarios o se intensifiquen las presiones cambiarias”, señaló. Para agregar que “La tasa de devaluación (del dólar oficial) debería continuar apoyando la competitividad, con acciones recientes para racionalizar el régimen cambiario y agilizar las exportaciones que también ayudan a respaldar la acumulación de reservas”.
De esta manera el Fondo planteó una simplificación de los tipos de cambios diferenciados, algo que el Ministerio de Economía había adelantado en las últimas semanas. Pero también sumó otros elementos como el mensaje de que no se usen reservas para controlar el techo de los dólares financieros.
“Deben evitarse las intervenciones en el mercado cambiario paralelo utilizando reservas o instrumentos de deuda externa a corto plazo. A medida que las condiciones lo permitan y se aborden los desequilibrios, las medidas de gestión de flujos de capital, las prácticas de moneda múltiple y las restricciones cambiarias también deberían eliminarse, ya que no sustituyen a una política macroeconómica sólida”, planteó el organismo.